martes, 5 de agosto de 2014

Sin artilugios

He pensado durante mucho tiempo sobre lo que quiero escribir en esta entrada. Como siempre, en las noches se me ocurren las mejores formas de expresarme, pero mi procastinación ha llegado a límites insospechados, al menos en este asunto. Cuando pienso en cómo quiero decir lo que quiero decir siempre viene a la mente un estilo como Carrie Bradshaw, pero ella por más real que se vea, es un personaje literario/televisivo (día a día aprendo a diferenciar el área dramática televisiva de la realidad, un porotito para mi)  el dilema que planteaba esta situación es entonces ¿cómo expresar lo que siento sin caer en el patetismo, superficialidad y torpeza que uno siempresiempresiempre quiere evitar? Finalmente, llegué a la conclusión, gracias a un amigo que hizo un perfecto resumen de mi estilo de vida (paréntesis para ti, sos un grosso y el mejor amigo no-presencial que una persona puede tener) que uno no puede fingir algo que no es, no digo ser patética, superficial, torpe lo asumo con entereza, pero hay temas que son relevantes para ciertas personas y para otras no, para mí, el tema amor/relaciones/parejas está, si es que no primero, dentro del top ten de relevancia para la vida. 
Quiero, de verdad quiero, hablar de ti, hacer un vómito verbal enorme y que sepas todo lo que he sentido, siento y probablemente, sentiré. Sin embargo, no puedo... pensé que sería más fácil, pero la verdad es que siento que no tengo nada que decirte que no sepas ya, no mucho ha cambiado para mi desde la última vez que hablamos sobre nosotros, y al mismo tiempo, nada de nada es igual,  lo que quizás si es diferente, es que esta vez no  pretendo  decir adiós ni prometer esperar, supongo que es parte de la madurez (bendita seas).
No puedo decirle adiós a la persona que quiero, supongo que algún día tendré que  hacerlo, un amor no puede sobrevivir del recuerdo y de un sólo corazón, y por otro lado, no puedo prometer esperar, no porque el amor no exista, es que sencillamente, la vida no se detiene y yo ya intenté congelar el tiempo una vez, tengo que fluir, esta vez, sólo fluir. 
Creo que es la primera entrada que escribo en este blog con pura necesidad personal, es corta, es breve, y sin tanto artilugio literario, pero me doy cuenta de lo feliz que me hace escribir, claramente preferiría escribir contenido más feliz, pero la vida y los temas relevantes para una persona varían, sí, eso mismo que ya mencioné... a veces la vida no te entrega lo más bonito en lo más importante para luego sí poder apreciarlo cuando te haga  toctoc a la puerta, llegado el momento, tengo muy claro que lo sentiré...

Por consiguiente:

No tengo dudas sobre esto;  Aún creo que eres mi  Mr.  Big.

Mr. Big y Carrie Bradshaw

Existen un millón de dudas-respuestas  en mí sobre lo que nos ha pasado. Lo sigo pensando, sintiendo, y sí, siempre esperaré un final feliz, porque así soy yo, y así eres tú, y no tengo nada más que aceptar. 

Hay un centenar de cosas más que quisiera escribir, pero no es el momento, quizás... pronto. 

Una pequeña advertencia: tengo temores, día a día, temores y pequeñas alegrías. !Salud!